En el territorio de la Jordania actual tuvieron lugar importantes acontecimientos de la historia del cristianismo durante siglos a lo largo del Nuevo y el Antiguo Testamento. Debido a su trascendencia religiosa, numerosos lugares de Jordania han sido nombrados centros de peregrinación y han recibido la visita del papa Pablo VI, el papa Juan Pablo II, el papa Benedicto XVI y el papa Francisco en el último medio siglo. Como tierra de convivencia religiosa, Jordania mantiene y protege estos lugares religiosos para los peregrinos de todo el mundo.
El libro de Josué narra que Mádaba y sus alrededores fueron asignados al hijo mayor de Jacob y Lea, Rubén: “Y fue el territorio de ellos desde Aroer, que está a la orilla del arroyo de Arnón (Al-Mujib), y la ciudad que está en medio del valle, y toda la llanura hasta Medeba (…) con todas sus ciudades que están en la llanura (…) Y el Jordán fue el límite del territorio de los hijos de Rubén. Esta fue la heredad de los hijos de Rubén conforme a sus familias, estas ciudades con sus aldeas.” (Josué 13:16-23).
El mapa mosaico de Mádaba que está situado en la iglesia griega ortodoxa es el mapa pictórico más antiguo de toda Tierra Santa e incluye los nombres de ciudades históricas y ríos. Se dice que el mapa se fabricó en la segunda mitad del siglo VI debido a su semejanza estilística con el mapa de la iglesia de los Apóstoles.
El lugar del asentamiento de Juan el Bautista en Betania de Transjordania, donde Jesús fue bautizado, se conoce desde hace mucho tiempo gracias a la Biblia (Juan, 1:28 y 10:40) y los textos bizantinos y medievales. En la actualidad, se ha determinado que este punto se encuentra en la ribera este del río Jordán, en el Reino Hachemita de Jordania, y se está estudiando, excavando, restaurando y preparando continuamente para recibir a peregrinos y turistas. Betania de Transjordania está ubicado a media hora en coche de Amán, capital del país. Las atracciones del área de Betania pertenecían a la ruta de peregrinación de los primeros cristianos entre Jerusalén, el río Jordán y el monte Nebo.
El libro de Josué narra que Mádaba y sus alrededores fueron asignados al hijo mayor de Jacob y Lea, Rubén: “Y fue el territorio de ellos desde Aroer, que está a la orilla del arroyo de Arnón (Al-Mujib), y la ciudad que está en medio del valle, y toda la llanura hasta Medeba (…) con todas sus ciudades que están en la llanura (…) Y el Jordán fue el límite del territorio de los hijos de Rubén. Esta fue la heredad de los hijos de Rubén conforme a sus familias, estas ciudades con sus aldeas.” (Josué 13:16-23).
El mapa mosaico de Mádaba que está situado en la iglesia griega ortodoxa es el mapa pictórico más antiguo de toda Tierra Santa e incluye los nombres de ciudades históricas y ríos. Se dice que el mapa se fabricó en la segunda mitad del siglo VI debido a su semejanza estilística con el mapa de la iglesia de los Apóstoles.
El ventoso promontorio del monte Nebo es un mirador hacia el mar Muerto, el valle del río Jordán, Jericó y las lejanas colinas de Jerusalén. Desde aquí, Moisés contempló la Tierra Santa de Caná, en la que nunca entraría. Murió y fue enterrado en Moab, enfrente de Bet-peor (Deuteronomio, 34:6). El monte Nebo se convirtió en un centro de peregrinación para los primeros cristianos de Jerusalén, y allí, en el siglo IV, se construyó una pequeña iglesia para conmemorar el fin de la vida de Moisés. Algunas de las piedras de esta iglesia continúan ubicadas en su emplazamiento original en el muro que rodea la zona del ábside. Más tarde, en los siglos V y VI, la iglesia se amplió hasta convertirse en la gran basílica actual, con su impresionante colección de mosaicos bizantinos.
La cruz con la serpiente, colocada en el exterior del santuario, representa la serpiente de bronce (o cobre) que Moisés llevó al desierto y la cruz sobre la que Jesús fue crucificado.
Se cree que Jesucristo, sus discípulos y la Virgen María pasaron por Anjara, en las montañas de Gilead, y descansaron en una cueva en su viaje entre el mar de Galilea, las ciudades de la Decápolis, Betania de Transjordania y Jerusalén. La cueva de Anjara ha sido por mucho tiempo un lugar sagrado para los peregrinos y, en la actualidad, se conmemora con un santuario moderno, la Iglesia de Nuestra Señora de la Montaña. La cueva también fue seleccionada como uno de los cinco lugares de peregrinación del Jubileo 2000 por la Iglesia católica de Oriente Próximo.
Descubra másDesde hace mucho tiempo, se cree que este sitio es el mismo lugar desde el que, según la tradición, Elías ascendió a los cielos. Elías, famoso profeta enviado al pueblo para sacarlo del paganismo, vivió en la época de reinado del rey Acab de Israel. Acab y su mujer oprimieron a Elías, y cuando Elías envejeció, Dios le dio la inspiración para marcharse y establecerse en la Jordania actual. Cuando Elías y su sucesor, Eliseo, llegaron al río Jordán, el primero lo golpeó con su manto y dividió las aguas. Ambos cruzaron por tierra seca y, mientras hablaban en la otra orilla del río, un carro de fuego apareció y subió a Elías a los cielos (2 Reyes 2).