Ocio y Bienestar
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Wadi Rum
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Mar Muerto
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Mádaba
Wadi Rum
Este es un lugar formidable y atemporal, prácticamente intacto por el hombre y sus fuerzas destructoras. Aquí, el clima y el viento han esculpido elevados e imponentes rascacielos, descritos con elegancia por Lawrence de Arabia como “vastos, resonantes y divinos...". La serenidad del desierto, sumada a la calidez y hospitalidad de su pueblo, convierten Wadi Rum en el destino perfecto para relajar cuerpo y mente.
Mar Muerto
A 410 m por debajo del nivel del mar, el mar Muerto es el lugar más bajo de la Tierra. La costa jordana del mar Muerto muestra uno de los paisajes naturales y espirituales más espectaculares del mundo, y continúa siendo tan seductor para los turistas internacionales como en la antigüedad lo fuera para reyes, emperadores, comerciantes y profetas. Sin duda, la atracción principal del mar Muerto es su agua, extremadamente salada y relajante. El contenido salino asciende al 31,5 %, por lo que el agua permite la flotación y el visitante no es capaz de hundirse. Además, el agua contiene altos niveles de 21 minerales, como el magnesio, el sodio, el potasio y el bromo, y 12 de estos minerales no se encuentran en ninguna otra masa hídrica del mundo. Los estudios han revelado que la combinación del agua del mar Muerto con el rico lodo negro de la orilla es realmente beneficiosa para la salud (mejora la circulación, alivia las molestias causadas por la artritis, cura alergias y revitaliza la piel).
Mádaba
Los turistas del mar Muerto deberían aprovechar la oportunidad para visitar otra maravilla de los alrededores, Hammamat Ma’in (aguas termales de Ma’in). Populares tanto para lugareños como para turistas, estas aguas se encuentran a 264 metros bajo el nivel del mar en uno de los oasis desérticos más impresionantes del mundo. Miles de bañistas llegan cada año para disfrutar de las aguas ricas en minerales de estas cascadas termales. Las cascadas nacen de las lluvias de invierno en el altiplano jordano y alimentan a los 109 manantiales calientes y fríos del valle. Estas aguas se calientan a temperaturas de hasta 63° Celsius por las grietas de lava subterráneas a medida que recorren el valle antes de desembocar en el río Zarqa.
