Tanto desde la antigua carretera del rey en dirección este como desde el mar Muerto en dirección oeste, el impresionante perfil de esta ciudad fortificada y su castillo le harán comprender al instante por qué se decidió aquí el destino de reyes y naciones durante milenios.
Karak, antiguo bastión de los cruzados, se alza a 900 metros sobre el nivel del mar, entre los muros de una ciudad antigua. En la actualidad, la ciudad alberga a casi 170 000 personas y sigue presumiendo de contar con edificios restaurados del periodo otomano del siglo XIX, restaurantes, alojamientos, etc. No obstante, sin duda es el castillo de Karak lo que más destaca.
Desde Amán:
Se puede llegar a la ciudad de Karak por dos carreteras principales. Hacia el sur, por la carretera del desierto, el trayecto debería alargarse entre una hora y media y dos horas. Por la pintoresca carretera del rey, el trayecto debería durar entre dos horas y dos horas y media.
Desde Áqaba:
Con dirección norte, tome la carretera del desierto o la carretera del rey. Por la carretera del desierto debería tardar 3,5 horas, mientras que por la segunda, el trayecto en coche dura 3 horas.