Situada en el extremo sur de Jordania, a unas 4 horas de la capital de Amán, Áqaba es una ciudad costera con encanto jordano. Gracias a los pozos de agua locales, los deportes acuáticos y su elegancia histórica para aquellos que desean volver al pasado, Áqaba es el complemento perfecto al atractivo metropolitano de Amán.
Durante el periodo bizantino, se llevó a cabo una gran actividad de construcción en todo el país. Todas las ciudades principales de la era romana prosperaron mientras la población regional aumentaba. A medida que el cristianismo se expandió por la región en el siglo IV, las iglesias comenzaron a brotar por toda Jordania.
En este contexto cristiano se produjeron los descubrimientos más apasionantes de los últimos tiempos. Los arqueólogos de Áqaba desenterraron la que se cree que es la iglesia más antigua del mundo, que data de finales del siglo III d.C. Esta iglesia es un poco más antigua que la iglesia del Sagrado Sepulcro de Jerusalén y la iglesia de la Natividad de Belén, ambas del siglo IV. Desde entonces se ha rellenado de tierra para protegerla.
El Museo Arqueológico de Áqaba se encuentra en la residencia de Sherif Hussein Bin Ali en Áqaba. Abrió sus puertas al público en 1990, y en la actualidad, alberga una importante colección de la ciudad islámica de Ayla que se remonta a los periodos rashidun, omeya, abasí y fatimí. Por lo tanto, representa los periodos islámicos de mediados del siglo VII a principios del siglo XII d.C.
Entre las piezas se encuentra la inscripción kúfica Ayat Al-Kursi del sagrado Qur'an (Corán), que estaba ubicada sobre la puerta oriental (Egipto) de la ciudad, así como un conjunto de dinares fatimíes de oro acuñados en Sajilmasa (Marruecos).
Información de contacto/ cómo reservar:
La admisión se incluye en el Jordan Pass.
La mezquita recibió el nombre de Hussein bin Ali, jerife y emir de La Meca de 1908 a 1917. Conocido como precursor de la revuelta árabe, Al Sharif Hussein Bin Ali se alzó contra el imperio otomano, cada vez más nacionalista, durante la Primera Guerra Mundial.
Con su impoluta estructura blanca, ventanas de vidrio intricado y minaretes, la mezquita de Al Hussein Bin Ali es un claro ejemplo de arquitectura islámica y un emotivo respiro en el bullicio de la vida urbana. Además, puede presumir de contar con la cúpula más grande de todas las mezquitas del país. Se considera la mezquita principal de los ciudadanos de Áqaba. Los visitantes pueden pasear tranquilamente por su elegante interior y contemplar la vida cotidiana de la ciudad con calma y devoción.